Guerra – Segunda fase
Escrito por Pablo González y Pedro Nonay tratando de entender las consecuencias de la Guerra.
Nota 2 – Guerra (segunda fase)
Leyendo a Putin y posible respuesta china
8 octubre 2022
Han pasado cosas desde que escribí la nota anterior (siempre pasan cosas), pero ninguna que se pueda considerar un cambio de situación sustancial.
Sí quiero resaltar lo siguiente:
- Una noticia por omisión: No son demasiadas las noticias de problemas en Rusia con los reclutamientos. Si las hubiera de forma considerable, nos lo contarían hasta la saciedad para hacer ver la debilidad de Putin. Si no lo hacen, es que no le va tan mal en cuanto a oposición de su pueblo.
- Sí son muchas las noticias malas de la economía de Occidente.
- La inflación continúa sin control.
- Todas las monedas se están debilitando contra el dólar (lo que no significa que el dólar no tenga problemas, sino que aflorarán más tarde, asunto del que hablaré luego).
- Esos debilitamientos de moneda hacen más cara la energía para Europa, lo que no viene nada bien en el lugar donde hay más necesidad de energía.
- Hay serios riesgos en Credit Suisse y en Deutsche Bank (su posición en derivados es 25 veces el GDP de Alemania, es decir, no tienen fácil el salvarle). Riesgos que, si se materializan, pueden generar algo peor que lo de Lehman Brothers, como se puede ver, por ejemplo aquí.
- Tampoco va bien el asunto de acceso a la energía en Occidente. En Francia ya han aprobado las primeras medidas de “racionamiento”. Han decidido bloquear los contadores digitales de gas de las viviendas durante unas horas al día (noticia aquí). En UK han aprobado algo parecido para la electricidad. Esto es sólo el principio, …y no ha llegado el invierno.
- Parece que Rusia sigue perdiendo algo de territorio. Y eso, tras los referéndums y las declaraciones de Putin, lo va a considerar invasión de territorio ruso. Es decir, puede sentirse autorizado a usar incluso armas nucleares.
- Ha habido un atentado contra el puente de Kerch, que une Crimea y Rusia. Ha quedado inutilizado. Esto es un golpe muy fuerte a Rusia, incluso moralmente. Y es en un objetivo un poco lejano a la Guerra. Está entre la Rusia de siempre, y Crimea (que es Rusia desde 2014, no por las recientes anexiones). Veremos la respuesta, …
Además, como era previsible, China no ha hecho prácticamente nada referente al conflicto. No creo que lo haga hasta después del día 16 de octubre. Y, … sí pienso que lo hará después.
Paso a hablar del:
Discurso de Putin del pasado 21 de septiembre.
Ya dije en la nota anterior que convenía leer con mucho detalle el discurso completo y literal. Da mucha más información que lo que ha salido en las noticias. Se lo recomiendo a todo el mundo, aunque es un poco largo.
Hay que leer el discurso con la visión del público a quien va destinado, aunque no la compartamos. Es la visión de la población rusa (con el adoctrinamiento cultural y la información que tiene). Para quien quiera leerlo completo, repito aquí el link.
Para quien no quiera gastar ese tiempo, le doy dos alternativas. La primera es que he generado otro documento (link aquí) donde incluyo el discurso literal, pero marco en amarillo lo que considero más sustancial, y pongo en rojo mis interpretaciones personales de lo que está diciendo.
La otra alternativa es leer tan sólo mis interpretaciones personales (sin contexto), que son las siguientes, por orden de aparición en el discurso:
- Desde el principio, centra sus objetivos (Donbás), que luego repetirá mucho. Antes no estaban oficializados los objetivos.
- También desde el principio, deja claro que la Guerra empezó en 2014, como golpe de estado armado, y que la empezaron los otros.
- Pronto concreta más sus objetivos (las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, y de las regiones de Jersón y Zaporiyia).
- Occidente no les deja ser libres de hacer las cosas a su manera. Y a Putin no le gustan los valores de Occidente (los llama pseudovalores).
- Desde luego, Putin no se considera nada cercano a Occidente (dice que ellos quieren debilitar y dividir a Rusia). La posibilidad de que Rusia acabase siendo parte de Occidente, aunque con su identidad de país, está completamente desechada.
- Ucrania es culpable desde hace mucho (la han utilizado como cabeza de puente para alimentar el odio a Rusia).
- Usa la palabra guerra por primera vez, y repite que la inició Occidente en 2014. Rusia se está defendiendo en los territorios liberados (en su discurso son eso, no anexionados), territorios que son claramente rusos, a su entender.
- Hace una oda a los patriotas, buscando que surjan más, y declara que los patriotas serán bien atendidos.
- Nuestros éxitos son grandes ya (tienen una línea de contacto de 1.000 km).
- Implícitamente, da por terminada la Operación Militar Especial. Ahora estamos en otra fase.
- Lo he intentado por las buenas (en Estambul se pactó un acuerdo pacífico), pero me han obligado a hacerlo por las malas. Además, doy las gracias a Estambul por colaborar en el intento: no eres nuestro enemigo.
- No estamos peleando contra Ucrania, sino contra la OTAN de forma encubierta (lo que es un poco cierto).
- Se apoya en viejos malos recuerdos (Stepan Bandera).
- Los referéndums son legales, y tenemos la obligación de proteger a esa parte de Rusia.
- El llamarlos “territorios liberados” dice mucho. No son conquistas, ni anexiones.
- No os asustéis, es sólo parcial (la movilización de tropas), y voy a tratar bien a los movilizados.
- Os aviso que nacionalizaré todo lo que haga falta: todos a las órdenes de Defensa.
- Fue Occidente quien hizo el bombardeo sobre la planta nuclear de Zaporiyia.
- Nuestra historia de éxitos en la defensa del país nos apoya. Lo defenderemos una vez más, usando los medios que haga falta, es decir, incluyendo armas nucleares.
Lo anterior es respecto a las cosas que dice en el discurso.
Quiero comentar un poco las que no dice. Las omisiones. Entre ellas:
- La más relevante es la falta de mención a sus aliados o amigos. La Guerra es de Rusia, y si la gana, el mérito es suyo.
Sabemos que tiene amigos, pero no les involucra, bien para no perjudicarles (porque no quieren ser citados, que es el caso probable de China), bien para no tener que compartir méritos.
Lo más que hace es decir (muchas veces) que su enemigo es Occidente. Por exclusión, el resto no lo es. También dice que Occidente quiere imponer sus “pseudovalores en otros países y naciones” (ahí sí está buscando socios).
También hace una mención a Turquía (el único lugar que cita) para agradecerles el intento de búsqueda de paz. Con eso intenta debilitar la cercanía (no tanta, pero algo) de Turquía a Occidente.
- Otra omisión importante es la casi nula mención a las tesis de Duguin, las de la nacionalidad étnica de Eurasia.
Lo más que dice es: “me dirijo a todos ustedes, a todos los ciudadanos de nuestro país, a personas de diferentes generaciones, edades y etnias, a la gente de nuestra gran patria, a todos a los que les une la gran Rusia histórica”.
El discurso es muy populista, y muy ruso, pero esquiva involucrarse por completo con la ideología de Duguin (sin perderle el respeto).
Además de las omisiones, me llama la atención el cambio de su actitud personal ante el contacto físico con otras personas. Las fotografías de antes y después del discurso reflejan un cambio que no es el esperable de forma natural.
Sería por razones médicas, o de seguridad, pero quedaba claro que tenía miedo a contactos físicos cercanos tras las varias veces que se le ha visto en mesas muy grandes.
Ahora parece haber perdido ese miedo, y no creo que haya mejorado mucho su salud, ni sus problemas de seguridad. Mas bien pienso que se ha visto obligado a hacer algo que no le gusta. Veo eso como una señal de debilidad. Aunque tal vez esté yo exagerando en aplicar los antiguos códigos de lo que se llamaba kremlinología en el pasado, que era sacar conclusiones de puestas en escena de los desfiles a falta de mejor información.
Lo que sí está claro, un poco explícitamente en el discurso, y otro poco de forma implícita, es que aceptaría parar la Guerra con un acuerdo por el que se quedase con lo que llama territorios liberados. Eso es algo que, evidentemente no gustaría nada a Ucrania, pero que, si se dan varias circunstancias (fundamental la posición de China), podría llegar a parecerle aceptable a Occidente, quien podría forzar a Ucrania a aceptarlo retirándole su apoyo.
La posición de China.
Ya expuse en la nota anterior que lo que Xi Jinping dijo es: “Frente a un mundo, una época y una historia en constante cambio, China está dispuesta a esforzarse con Rusia para asumir el papel de grandes potencias y desempeñar un papel de guía para inyectar estabilidad y energía positiva en un mundo sacudido por la agitación social.»
Queda claro que, con esas palabras, China no se está oponiendo expresamente a Occidente (como sí hace Putin), pero sí está dispuesta a colaborar con Rusia en gestionar el poder del mundo cambiante.
China ha dicho repetidamente que respeta la integridad territorial de los países, y los acuerdos internacionales. Lo cierto es que, respecto a esos dos asuntos, puede decirse que los cumple mucho mejor que Occidente, no sólo en esta Guerra, sino en casi todos los acontecimientos de décadas.
En cuanto a la integridad territorial, alguien puede decir que China no la respeta por el asunto de Taiwán. Ante eso, la respuesta es doble: por una parte, China no ha hecho nada militar contra Taiwán (por ahora), y por la otra, China considera que Taiwán es China, con lo que no sería interferir contra la integridad territorial (en realidad, es el mismo caso de Rusia con el Donbás).
China se auto reconoce esencial (lo es), y se posiciona en el lugar de “hombre bueno” para intermediar.
También hemos visto que, un poco después, el portavoz del ministerio de Exteriores chino, Wang Wenbin, ha reclamado “a las partes relevantes alcanzar un alto el fuego a través del diálogo”. Esto hay quien lo ha contado como crítica a Putin. Yo lo veo como preámbulo de la oferta de mediar para la paz.
A mí me suena a que China no quiere Guerra, pero sí quiere que haya un nuevo reparto del poder mundial tras el cual, China (y Rusia) no incumplan ninguna regla internacional si intentan hacer las cosas en su territorio de forma distinta a como le gusta a Occidente.
India
Ya he comentado que, en la reunión de Samarcanda, el primer ministro de India, Narendra Modi, le dijo a Putin que «ahora no es el momento para guerras».
Esto se ha interpretado en la prensa occidental como un tirón de orejas a Putin. Y puede serlo.
También puede ser la escenografía de un acuerdo por el que:
- Putin se pone “bruto” ante Occidente (le mete miedo con la guerra nuclear, y presión con la economía, por la inflación causada por la escasez de energía);
- India pone la cara amable a Occidente (aunque hace negocios de energía con Putin, e incluso revende luego a Occidente);
- Y China acaba haciendo la propuesta negociadora de paz.
- A esta presión a Occidente se puede sumar también la OPEP, con su bajada de producción, lo que significa subida de precio del petróleo, es decir, aumento de inflación en Occidente.
Habrá que esperar para ver cómo evoluciona la posición de India para saber en cual de los dos casos estamos.
Usa y Europa.
USA está muy nerviosa. Habla mucho de la Guerra nuclear. Dice que es el momento de más riesgo desde los misiles de Cuba. Esto, siendo cierto, significa que están “preparando a la audiencia”.
Por supuesto que no les gusta llegar a ese tipo de Guerra, pero, mientras tanto, se están beneficiando económicamente dentro de Occidente. No es que estén bien (también tienen problemas de inflación), pero están mejorando respecto a Europa. Eso es por la fortaleza del dólar y por negociarse en dólares la energía, además de por no tener ellos escasez de energía.
Incluso hay quien dice que el ataque contra el gaseoducto Nord Stream lo hizo USA, con el objetivo primario de acusar a Rusia (ataque de falsa bandera), y el secundario de debilitar económicamente a Europa en el reparto de poder dentro de Occidente.
Por las mismas razones, Europa está muy mal. Hay serios riesgos de división de opiniones entre los países, y dentro de ellos. Apoyar el continuar la Guerra se le hace cada vez más difícil.
Lo que más le importa a USA es conocer la posición real de China, cosa que Xi Jinping no va a decir hasta después del 16 de octubre.
USA sabe que, si China no apoya a Rusia, y si Europa no se retira de la Guerra, es muy probable que gane. Pero también sabe que, si China apoya a Rusia, es más probable perder, más aún si Europa se retira.
Parece que están todos con los nervios a flor de piel, y esperando a China.
Mientras tanto, en ese estado de nervios, existe el riesgo de que alguien se equivoque con resultados catastróficos.
El riesgo nuclear.
Se discute mucho sobre el riesgo de que se utilicen armas nucleares.
Lo primero que hay que decir es que, si alguien tiene cualquier arma y se encuentra en la “conveniencia de usarla”, lo normal es que lo haga. Es verdad que la función principal es disuasiva (que nadie quiera enfrentarse con él por tener ése arma), pero también es verdad que la posibilidad de usarla siempre existe.
Desde luego, cuesta mucho dinero crear y mantener esas armas. No es normal aceptar perder una guerra sin considerar usarlas.
También es verdad que la respuesta asusta a cualquiera (el Armagedón). Es algo a considerar mucho antes de utilizarla.
La cuestión crítica aquí es lo que he dicho arriba de encontrarse en la conveniencia de usarla. La conveniencia, o no, la va a decidir el que la usa, es decir, es su conveniencia. Y lo va a decidir con sus criterios (nos gusten o no). Criterios que pueden ser los del bien del mundo, de su país, o de su persona. Y, si son los de la persona (Putin), no es descartable que diga: “si tengo que perder, no me importa que se acabe el mundo conmigo”.
Por otra parte, se está hablando bastante del concepto “arma nuclear táctica”. Se refieren a bomba pequeña y a no desencadenar la Guerra nuclear total. Por supuesto que esto es posible, y parece que nos están preparando psicológicamente para ello.
En ese caso, el de las armas tácticas, tampoco es descartable que las usen como ataque de falsa bandera. Que la lance USA diciendo que lo ha hecho Rusia para buscar el rechazo del mundo a Rusia.
Otra cosa no descartable es evitar la imagen de haber usado esas armas, pero buscar el mismo resultado. Sería el caso de forzar la explosión de centrales nucleares.
En cualquier caso, además de la decisión de usar las armas por parte de quien sea (Putin), hace falta que te secunden todos los que tienen que participar en el proceso. Si te hacen insurrección, o sabotaje, el lanzamiento no ocurre. Es seguro que todos los servicios secretos del mundo estarán trabajando en intentar forzar esos sabotajes, estarán intentando convencer o comprar a alguien.
Conocemos algo (tampoco tanto) los sistemas de aplicar esa decisión en USA, pero conocemos muy poco los rusos. Me he encontrado con un video interesante sobre eso (se puede ver aquí). Resulta que las decisiones sobre las armas nucleares tienen que pasar por quien las tiene físicamente, que es el Directorio número 12 del Ministerio de Defensa (12 GU MO). Una posibilidad es que no acaben siendo ciegamente leales a Putin.
Repito lo que ya he dicho varias veces. No creo que Putin tome esa decisión antes de saber la posición definitiva de China.
La oferta de China.
Tras todo lo dicho, si Xi Jinping renueva su mandato en el congreso del 16 de octubre, creo que tomará su decisión sobre la forma de actuar ante la Guerra, … aunque no tiene por qué hacerla pública.
Esa decisión se puede simplificar en el apoyo a Occidente, o a Rusia, o la indiferencia (que se peleen entre ellos sin hacer nada especial a favor de ninguno).
En base a lo que he expuesto hasta ahora, y a la habitual forma de actuar de China, si yo fuera Xi Jinping, intentaría buscar una posición intermedia pero no belicista. Sin incumplir ningún tratado internacional, pero buscando una paz útil para China y aceptable para todos los demás. Sería algo así como si China hace una declaración diciendo:
- Occidente lleva razón en que hay que proteger la paz mundial y respetar los tratados internacionales.
- Rusia lleva razón en que Occidente no nos deja llevar nuestros países a nuestra manera.
- Occidente tiene serios problemas económicos a los que le debe prestar atención. La Guerra acentúa esos problemas, y una paz sin dar solución a sus suministros energéticos no les vale.
- China propone:
- Hagamos los pactos para el nuevo orden mundial (la nueva conferencia de Yalta).
- Creemos un mundo de dos bloques, siendo China líder de uno (en el que participa Rusia), y USA líder del otro.
- China se encarga de controlar a Rusia y convencerle de que pare la Guerra. Es decir, China pacta con Rusia su fuerza dentro de su bloque, y Rusia se considera tranquila y ganadora, además de autorizada para hacer las cosas a su manera (distinta de la occidental).
- El bloque chino garantiza un periodo de transición al bloque occidental para “desmontar” la antigua globalización.
Sería un tiempo largo (¿20 años?), durante el cual el comercio de energía, cereales, y otras materias primas estaría garantizado entre los bloques, pero con acuerdos para su disminución gradual. Con ello, se acabarían los actuales problemas económicos de Occidente.
En ese mismo plazo se desmontarían las inversiones empresariales de cada bloque en el otro. Es tiempo para amortizarlas o venderlas. - Y, casi lo más difícil, pactemos las fronteras entre los bloques (Ucrania, Taiwan, …). Para ello puede proponer referéndums no tramposos en cada lugar, y hacer lo que quiera el pueblo.
En el caso de Taiwan, puede proponer algo parecido a lo de Hong Kong (un tiempo muy largo para una incorporación gradual).
En cualquier caso, a la población y a las empresas se les daría tiempo y facilidades para tomar sus decisiones de cambiarse de bloque si no les gusta el resultado.
- Hagamos los pactos para el nuevo orden mundial (la nueva conferencia de Yalta).
No me extrañaría nada que hagan algo parecido. Por supuesto, con un lenguaje mucho más diplomático y sofisticado, y contemplando muchos detalles.
Si lo hacen, habría que ver la respuesta de cada parte.
Seguro que a Rusia le vale (si se queda el Donbás y libertad para actuar).
Europa lo aceptaría. Sobre todo, si se le da algo de prioridad en el suministro de energía y cereales desde el bloque chino en comparación con USA, y algo de respeto (sería la forma de “comprarla”). Europa no puede ganar la Guerra sin USA, y va a quedar económicamente destrozada, aunque la gane USA. Podría beneficiarse de ser parte del bloque USA, pero la parte que se lleva bien con el bloque chino (la que gestiona el comercio entre bloques).
A USA no le gustaría nada, pero sin el apoyo de Europa, ni el de China, tendría difícil seguir la Guerra. Y, con soluciones económicas y de libertad para actuar en su bloque podría quedarse algo satisfecho.
China, sin haberse involucrado en la Guerra, pasaría a oficializar su relevancia mundial. Podría continuar con su forma de entender la sociedad. Y tendría plazo para cambiar sus clientes y proveedores de Occidente por otros nuevos en su bloque, o en Asia, Africa, …
Ucrania estaría muy triste y disconforme, pero si hay paz, y compromisos de reconstrucción en sus dos partes, podría aceptarlo, máxime si no le apoya nadie en continuar.
Si, al final no le hacen caso a su propuesta, China sigue teniendo las posibilidades abiertas de apoyar a Rusia, a Occidente, o la de quedarse indiferente.
Muy pronto vamos a ver lo que ocurre.
Hasta aquí he llegado por hoy. En siguientes notas trataré lo que haya pasado mientras tanto, así como la situación de Europa, muy debilitada por la energía y por el dólar, así como lo de que la fortaleza del dólar puede ser tan sólo transitoria.